miércoles, 29 de abril de 2009

La problemática gay

La sabiduría popular de Facebook nos da la respuesta al enigmático comportamiento del segmento de población masculina conocida como gay o locaza plumera, con fuerte tendencia a la lengua viperina:

Van porla vida creyendo que son Ute Lemper.....

Y realmente....son la Bim Bam Bum....




lunes, 27 de abril de 2009

Laxitud

La laxitud moral llega a ser tanto igual de dañina como el mal activo. Deforma espíritus libres y bellos y los empuerca rebozándolos en el barro de la maldad y la degeneración.¡No lo dice Ignatius Reilly, pero casi!

lunes, 20 de abril de 2009

teodicea

La teodicea es aquella disciplina filosófica-teológica que trata de argumentar cuál es la explicación de la presencia del Mal en el mundo, pues parece contradictorio con la definición misma de Dios y el postulado de su existencia el por qué de la existencia pareja de este  en su creación.

Tradicionalmente, el dogma católico (ignoro los demás dogmas religiosos que hayan analizado este problema), se ha defendido mediante argumentos de relativización del mal. Estos argumentos tienen en el Tomismo su culmen,y a grandes rasgos tratan de demostrar que lo percibido como mal no es realmente tal en sí mismo, mediante la clásica fórmula que sostiene que "el mal es la privación del bien (debido.)" Es decir, el mal no tiene una consistencia ontológica ni existencial por sí mismo, sino que es una mera ausencia de otra cosa.El mal surge de la imperfección del mundo frente a la perfección divina, y también es consecuencia de la libertad del Hombre y de su elección personal. Argumentos posteriores de racionalistas como Leibniz postulan que el mal con existencia real en el mundo es mucho menor que el percibido por nostros, y que Dios arquitecto, en el momento de hacer el mundo, se vio obligado a introducir una cantidad de imperfección ínfima puesto que no podía hacerlo de otra manera, siendo el resultado de este acto de creación "el mejor de los mundos posibles", en términos lógicos y ontológicos.

Sistemas filosóficos anteriores al cristianismo recogen un tema relacionado, como es en ética el llamado intelectualismo moral: quien mal obra no es malvado sino ignorante. (Platón.)


Ernesto Sábato comienza su Informe sobre ciegos desmontando la argumentación del argumento ontológico clásico de San Anselmo. Tras la operación de implacable lógica, el resultado es que es el Mal el que gobierna el mundo, puesto que no puede haber Dios.

Literatura aparte, todos los argumentos religiosos pueden parecernos pueriles o infundamentados en la razón y en la experiencia, las cuales nos indican: la primera, que están mal construidos lógicamente, y la segunda, que estamos rodeados de un mal algo más que relativo. La Historia no es más que la narración de una sucesión de crímenes atroces entre los cuales todos los pueblos de la tierra de encuentran figurando, según el momento, de víctimas o verdugos, o ambas cosas al tiempo.


Aún así, somos en ocasiones mucho más ingenuos de lo que nosotros mismos queremos creer. Creemos que los crímenes siempre ocurren en otra parte, y que las personas que nos dañan tienen motivaciones sentimentales fuertes  para hacerlo, y que en el fondo no quisieran hacernos ese mal, ni a nosotros ni a otras personas.Creemos que los crímenes son una excepción al comportamiento humano en general. Cuando lo cierto es que hay millones de personas que se mueven por malicia, maldad, crueldad, sadismo, perversión, etc etc en casi todos los ámbitos de su vida cotidiana y que no lo hacen motivados por ninguna razón comprensible, no ya excusable. Simplemente son malos porque les gusta serlo, porque son así.

Si nos tomamos unos instantes de reflexión, seremos conscientes de que el mal existe en sí mismo como una entidad sustentada por sí y para sí. El mal tiene una existencia propia y separada.Se nos presentará fenomenológicamente en la conciencia con la misma naturalidad y espontaneidad con la que  apreciamos en aquel famoso atardecer en el horizonte la gratuidad de la belleza y el placer estético. La risa sórdida y estúpida , la mueca despreciable y repugnante de aquel que acaba de cometer un acto de maldad gratuito tiene la misma consistencia que cualquier sentimiento bello y bueno, y nos produce una sensación propia y caracterísitca.

Ha de comprenderse que no nos remitimos aquí a las acciones basadas en el resentimiento moral, en el de venganza o culpabilidad. Nos referimos a la espontaneidad de la mala acción.


Dejemos de ser ingenuos y tengamos cuidado con los ciegos.

lunes, 13 de abril de 2009

Rosa de Alejandría

Rosa de Alejandría , rosa amarilla,
Alejarme quiero. Adentrarme en el silencio.

Alejarme quiero
De esta vida que yo vivo sin convencimiento.
Y adentrarme en el tiempo de las luces,
Barros vivos encendidos por la mano
Del misterioso alfarero.

Alejarme quiero. Adentrarme en el silencio.
Caminar sereno. Abandonar esta senda.

Alejarme quiero.
Anidar en los atrojes
Con las golondrinas de azuladas plumas.
Convertirme en caja de medir fanegas,
Arrobas, celemines; ser trigo en las eras,
Nunca polvo en las aceras.

Rosa de Alejandría, rosa amarilla.
Hoy has de ser mi guía, la luz que brilla.
Faro de mediodía, rosa sencilla.
Rosa de Alejandría, rosa amarilla.

Con las flores de un campo encendido
Como un San Francisco entre jarales vivos
De lagartos, vivo.
De quimeras me alimento,
Con simplezas me contento.

Mozas de risueño gesto en calma me encuentran
Como a un Góngora perfecto,
Perviviendo lejos del bullicio,
Con mi rosa amarilla, con mi rosa de los precipicios.

Alejarme quiero. Adentrarme en el silencio,
Alejarme quiero. Abandonar esta senda.
Alejarme quiero.

Rosa de Alejandría, rosa amarilla.
Hoy has de ser mi guía, rumbo entre islas.
Faro de mediodía, rosa sencilla.
Rosa de Alejandría, rosa amarilla


Manolo García

sábado, 11 de abril de 2009

Cazador de monstruos

He cazado unos cuantos monstruos en mi vida. Bueno, cazar no es la palabra exacta. Más bien, los he descubierto, y ellos a mí, y ahora me persiguen. A veces me fatigo tanto de huir que creo que no merece el esfuerzo y tengo ganas de tirar la toalla, de que se queden con su mundo, de que vivan y yo por fin disfrute de una paz eterna.

Por desgracia, hay tantos.

Me pregunto si yo seré este tipo de monstruo para alguien, quiero decir, un montruo dañino y destructor, no lo sé, pero en todo caso:

Este maravilloso cuadro escalofriante.

Este David, imberbe, tenso aún por el terror, por el pánico de haberse enfrentado al monstruo Goliath, deposita, desafiante, su cabeza cortada mirando a diestra y siniestra para comprobar que su victoria le ha confirmado efectivamente como el genuino ganador. Ganador de los derechos de hombría, de valentía, de fuerza, de autoridad.

Amigos, todos los días hay que matar a Goliath.

Eso es lo agotador de la lucha.


David With the Head of Goliath and two Soldiers, Valentin de Boulogne
Valentin de Boulogne
David With the Head of Goliath and two Soldiers
ca. 1620-22

miércoles, 1 de abril de 2009

Los aterradores susurros del pájaro

(Ella) me arrastraba...como  a un perro. Amarrado a una cadena para que la siguiera a todas partes y la obedeciera, ciego y sin voluntad (...)con un collar con puntas para adentro de esos que usan para amaestrar a los perros, uno no puede hacer otra cosa que obededer, porque el collar hiere cuando uno se resiste (....) por fin, con el cuello llagado, uno ya no es capaz de resisitir más y obedece porque duele demasiado no obedecer (....) llego a olvidar que alguna vez, en el pasado, lejos, quizá tuve voluntad o intenté desobedecer, cuando aún comprendía lo que es desobedecer.


José Donoso, El obsceno pájaro de la noche